La quinta sesión del programa Xanela, «Xanela 05 · La importancia de la #Investigación«, que tuvo lugar esta semana, contó con la participación de Eva Poveda, Directora Científica del IIS Galicia Sur y Beatriz Gil de Araújo, Directora de la Fundación Biomédica Galicia Sur.
El programa, conducido por Antonio Fernández Campa, gerente de ACIS, y disponible en el canal de Youtube de esta entidad, se estructuró en dos mesas redondas, con el fin de abordar el papel fundamental de la investigación e innovación sanitarias y debatir sobre los retos que se afrontan desde este ámbito.
En la primera mesa se trataron temas relacionados con los principales retos a corto y medio plazo de la investigación en el ámbito sanitario, la transferencia de resultados a través de la creación de spin-off en el Sergas y la importancia de la colaboración público-privada para abordar los grandes desafíos en salud. Contó con las intervenciones de los investigadores del IDIS María de la Fuente, directora de la Unidad de NanoOncología del IDIS y Anxo Fernández, investigador Juan Rodés, y con el Director de Investigación Clínica de Novartis, Javier Malpesa.
En la segunda mesa, Eva Poveda y Beatriz Gil estuvieron acompañadas de Rafael López, Jefe de Servicio de Oncología Médica del CHU de Santiago y líder del grupo OncoMed. En sus intervenciones, hablaron sobre la excelencia de la investigación realizada desde los institutos de investigación sanitaria, destacando la reciente consecución de la acreditación del Instituto de Investigación Sanitaria Galicia Sur por parte del Instituto Carlos III, un hecho que, en palabras de Poveda «nos sitúa en la élite de la investigación biomédica a nivel nacional, junto a los otros dos institutos gallegos» lo que suponen muy buenas noticias para Galicia y la investigación que se realiza aquí y «una gran oportunidad para seguir mejorando, para ser más competitivos y para mejorar nuestra capacidad de captación de fondos en convocatorias púbicas, de infraestructuras, recursos humanos proyectos».
Supone un entorno único de colaboración con otros institutos a nivel nacional y para la reflexión y el análisis y la implementación de mejoras. Puntualiza Poveda que conseguir la acreditación también supone una responsabilidad para continuar este camino de excelencia y cumplir los retos del Plan Estratégico del Instituto, entre los que destaca la consolidación de la investigación clínica traslacional, la captación y retención de talento, favoreciendo el relevo generacional y el fomento del trabajo realizado desde la atención primaria —contexto clave para evaluar cuál es la situación de salud de la población y poder implementar medidas de prevención y diagnóstico y acercarnos más hacia esa medicina de precisión o personalizada—. Destaca en este sentido la participación desde Galicia en el programa IMPACT del Sistema Nacional de Salud.
Sobre la interacción entre los tres Institutos Gallegos, IDIS, INIBIC e IISGS, destaca la Directora del Galicia Sur la buena relación existente y la importancia de esta colaboración para poder generar sinergias y ser más competitivos de forma conjunta. En 2023 se retomarán las jornadas BioIntegraSaúde paralizadas a causa de la pandemia y que tienen como objetivo «que los tres institutos convivan y se generen estas sinergias».
Acerca de la interacción entre la investigación básica y la clínica, afirma Poveda que «la forma más optima de enfocar los retos en salud es a través de un abordaje multidisciplinar con investigadores básicos y clínicos trabajando conjuntamente, de forma que la traslación esté ya desde las primeras etapas, sea un objetivo del estudio», es la manera de conseguir «tener un impacto de mejora en la salud de los ciudadanos y ciudadanas».
Por su parte Beatriz Gil de Araújo aportó la visión desde las fundaciones de gestión de la investigación sanitaria, cómo pueden potenciar la investigación que se realiza desde los institutos y los retos para llevar a cabo la traslación de resultados. Destacaba la Directora de la Fundación Biomédica que gestiona la actividad del IIS Galicia Sur la convocatoria para grupos emergentes que acaba de publicarse recientemente y constituye una de las primeras acciones puestas en marcha tras conseguir la acreditación. Forma parte de un ejercicio de reflexión y análisis de los grupos de investigación y de identificación de aquellos con un gran potencial de desarrollo, sobre los que centrar acciones para que puedan desarrollar todas sus capacidades. El programa de apoyo a grupos emergentes y de atención primaria y enfermería que tiene en marcha el IISGS contempla también otros aspectos como la formación o la intensificación de profesionales, además de apoyar los proyectos multidisciplinares y de investigación traslacional.
Respecto a los retos en la traslación de resultados, alude Gil de Araújo a la «falta de cultura en España de emprendimiento e innovación», un aspecto en el que se está incidiendo en los últimos años pero en el que todavía queda camino por recorrer, al igual que en la relación con las empresas. «Uno de los mayores problemas, especialmente en el sector biomédico y en el ámbito hospitalario es el gap, la distancia entre un resultado de investigación y la posibilidad de aplicarlo a un paciente«, lo que achaca a la complejidad del proceso regulatorio de los productos sanitarios, tratamientos, medicamentos, kits diagnósticos, etc. Aboga Gil por incorporar a los socios empresariales desde estadíos tempranos de los proyectos y por incentivar la relación con la industria, además de fomentar la cultura innovadora. Destaca el esfuerzo que se ha realizado en Galicia en estos aspectos, como la publicación del decreto de transferencia y la financiación mediante programas como el Ignicia, de la Axencia Galega de Innovación o el Pris de ACIS, que han contribuido a que los resultados de investigación «no se hayan quedado en un cajón». Considera que «deben potenciarse estos mecanismos» e incluir la traslación en la evaluación profesional de los investigadores.
Durante el programa, se abordaron también aspectos como el equilibrio entre la competitividad de la investigación y la necesidad de estabilizar recursos estructurales de apoyo y líneas de investigación que ya hayan demostrado ser excelentes y competitivas y hayan aportado conocimiento científico para mejorar la salud; la necesidad de buscar otras fórmulas de financiación, además de la estructural, mediante financiación privada o micromecenazgo; y el aprovechamiento de los datos sanitarios para potenciar la medicina de precisión y la colaboración en el espacio europeo de datos compartidos.
Visita nuestras redes sociales